Ruta fluvial donde se observará el ecosistema típico de ribera y su aprovechamiento histórico (1h).
En esta ruta nos adentramos en la zona fluvial, llena de chopos cabeceros (especie de gran valor maderero en la antigüedad). En estos ecosistemas de ribera tan modificados por las actividades humanas, los chopos cabeceros actúan como la pieza clave del sistema silvopastoril, ya que tienen un alto valor ecológico. Asimismo, los troncos viejos de los chopos suelen presentar huecos, que sirven de refugio a la fauna que necesita árboles viejos para criar (aves y mamíferos, especialmente). Su presencia también aporta setas de chopo, una exquisitez culinaria.
También encontramos arces (Acer sp.), zarzas (Rubus ulmifolius), los rosales silvestres (Rosa canina), el espino albar (Crataegus monogyna ) o el endrino (Prunus spinosa), en un entorno idílico.
En los suelos permanentemente húmedos o inundados temporalmente, aparece una gran diversidad de plantas propias de estos hábitats como la menta (Mentha longifolia (L.) Huds), el epilobio (Epilobium hirsutum L.), la espadaña (Typha latifolia L.) y los juncos (Scirpoides holoschoenus)